martes, 3 de junio de 2008


LECTURAS BÍBLICAS. Ciclo A. Liturgia completa. 31 de Mayo. Sábado 8ª semana de tiempo ordinario. Visitación de la Vírgen María. Sofonías 3,14-18 O bien Romanos 12,9-16b. Interleccional: Isaías 12,2-6. Lucas 1,39-56. (Año par: Judas 17.20b-25. Salmo responsorial: 62. Año impar: Eclesiástico 51,17-27. Salmo responsorial: 18. Marcos 11,27-33).
(La Visitación de la Virgen a Isabel)
Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según san Lucas. Capítulo 1 versículos 39 al 56.
En aquellos días, María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá: entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: ¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. ¡Dichosa tú, que has creído!, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá. María dijo: Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo. Y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes; a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia -como había prometido a nuestros padres-, en favor de Abrahán y su descendencia para siempre. María se quedó con Isabel unos tres meses y después volvió a su casa.
(Fuente: Sagrada Escritura; http://servicioskoinonia.org/ y
http://www.es.catholic.net/)


COMENTARIO BÍBLICO GENERAL. Carlos Alcántara Fuente: Catholic.net
“La Visitación de la Virgen a Isabel”. Preparar el corazón, María viene a verte. La persona de María siempre tiene algo de atrayente, algo que resuena en nuestras almas por ser ella el modelo más perfecto de la Creación. Contemplemos la escena. María, una joven de unos 15 años, como muchas de su época. Una joven que lleva en su seno la Vida apenas concebida. A quien prepare su corazón, como María o Isabel, Dios, no deja de darle el don del Espíritu Santo. Sólo quien tiene a Dios puede darlo a los demás. Cristo viene, ¿estamos listos para recibirlo?
(Fuente: http://www.es.catholic.net/aprendeaorar/103/1691/articulo.php?id=4842)



No hay comentarios: